17/8/10

Entre sueños y voces

¿Quién soy? ¿a dónde voy?... Qué preguntas más básicas.. y quien iba a pensar que a esta altura iban a ser practicamente lo único que se pasa por mi mente. Tengo tantas dudas que serían imposibles de enumerar y tan pocas certezas que con los dedos de una mano me bastaría para contarlas. Si tuviese al menos dudas certeras (mas allá de la paradoja de esto) quizás las cosas serían al menos un poco más fáciles. Sabría a qué le estoy buscando una respuesta.. Pero con tantas incertidumbres dando vueltas en el aire es díficil entender y entenderme. Y como si fuera poco se le suma estas dos voces en mi cabeza, que no se callan nunca. Me gustaría encontrar un equililbrio pero son tan diferentes que a veces hasta parece imposible. Por momentos escucho a quien era yo antes.. que quiero perdonar, quiero querer, quiero seguir, quiero reír, quiero sentir. Por otros momentos no quiero nada más que mi soledad, mi parte más oscura, esa que prefiere ser inmune a todo y alejarse del afecto.
A veces quiero escuchar, quiero comprender, quiero ser un poco humana... quiero estar para quien lo necesita y darle un abrazo a quién me lo pide con la mirada. Quiero ser esa persona que tenía sueños, que tenía Fuerza. O más que tenerla, como diría la frase, la Sentía. Pero no esa fuerza que te ofrece un escudo, sino esa fuerza de sentir que se puede ir totalmente desarmado al frente de batalla total nada ni nadie es capaz de derribarme. Así me sentí en otros tiempos. Y así por momento siento que es como quiero sentirme..
Y por otros creo ser así no me trajo nada. Quizás si lo hizo, quizás me regaló muchas cosas que por la negatividad del momento aún no puedo ver. Antes sentía que ser de una forma te traía más beneficios en la vida. Algo así como el karma, como quien diría.
El problema es que al no creer más en eso, las fuerzas para seguir siendo de cierta manera se desvanecen.. Si comportandome de una forma o de otra los logros van a ser los mismos... y los castigos también.. qué sentido tiene?
Le perdí el sentido a ser de una forma u otra y eso me mató lo más profundo de mi identidad.
Básicamente lo que puedo decir es que ya no creo... no creo en lo que me rodea, en la vida, no creo en mí. No creo en un futuro y por ende tampoco puedo verlo.
Tengo sueños pero son sueños tan débiles. Cómo quién cree en Dios, que supone que existe pero también sabe que nunca lo va a ver, aunque tenga cierta esperanza.
Así son mis sueños.. los veo, los imagino... pero sé que nunca van a pasar porque no tengo la fuerza o no siento la fuerza de soñarlos como para realizarlos. Yo sólo sueño cómo escape, no como objetivo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Mirando pasar, a los pájaros volar.
No hace falta decir que quiero uno en la mano.
No hace falta decir a dónde van ...
Cien pájaros volando .